La historia de San Valentino



San Valentino -visto los orígenes italianos del santo- protagonista de una festividad conocida también como "el día de los enamorados" o en algunos países como "el día del amor y la amistad."


El Mito:
Existen varias historias que sostienen los orígenes y la popularidad del mito, todas al parecer resultado de la voz popular, las más conocidas son un par de ellas que cuentan episodios de la vida de Valentino, obispo y mártir cristiano.


Una historia cuenta que el religioso Valentino, indultado ya una vez, volvió a ser condenado a morir decapitado por no renunciar a su fe cristiana y mientras llegaba el momento de su ejecución encontrándose prisionero obró el milagro de devolver el don de la vista a la hija ciega de su carcelero, se dice que gracias al amor que llegó a sentir por la joven. Tiempos después cuando estaba a punto de ser decapitado, se despidió por última vez de la joven con un tierno mensaje que firmó con las palabras: dal vostro Valentino...de ahí el mito que el amor obró el milagro.


Otra historia relata que Valentino, quien fuera ya obispo de Terni (ciudad italiana), desafiara los rígidos cánones de la época uniendo en matrimonio a una joven cristiana gravemente enferma con un "centurión" romano y pagano; la unión era obstaculizada por los padres de la joven pero aún así, cuando la vida se ella se estaba apagando, el noble Valentino llamó al joven soldado y lo bautizó convirtiéndolo al cristianismo para posteriormente unirlos en matrimonio justo antes de la muerte de la joven esposa.
El día de San Valentino -considerado santo protector de los enamorados- se estableció un par de siglos después de su muerte, en 496 cuando el entonces Papa Gelasius decidió sustituir las fiestas paganas de la fertilidad -dedicadas al dios Lupercus- inspirándose en las acciones de amor realizadas por San Valentino y es desde entonces que la fiesta en su honor se celebra anualmente el 14 de febrero en casi todo el mundo.

San Valentín fue incorporado al santoral en 1969, fue la Iglesia quien decidió erigirlo en patrón de los enamorados y decretó el 14 de febrero como día indicado para esta festividad. 
 
Todos sabemos que el día de San Valentín es el día de los enamorados, lo que convierte a este santo en el representante del amor, al menos en nuestros días. Pero, ¿sabemos realmente quién fue San Valentín y por qué ha llegado a representar a los enamorados? Aquí tienes su historia... 


En el año 270 D.C., Claudio II, Emperador de Roma, prohibió contraer matrimonio. Claudio emitió este decreto porque estaba convencido de que los hombres casados eran malos soldados ya que, en caso de guerra no querían separarse de sus familias. Claudio también había prohibido el Cristianismo en esa época porque deseaba ser alabado como el dios supremo, como el Emperador de Roma. 

Valentín fue obispo durante este período de opresión . Él pensó que los decretos de Roma eran indignos y estaba convencido de que el pueblo debía ser libre para amar a Dios y para contraer matrimonio, por lo que le pidió a las parejas jóvenes que fuesen a él. 
Estas lo hicieron, y Valentín los casó en secreto. 


Pero llegó un momento en que apresaron a Valentín y lo llevaron ante el emperador 
Éste vio que Valentín era un hombre de una gran convicción  y voluntad superior a la del resto de los hombres Claudio intentó persuadir a Valentín una y otra vez para que renunciase al Cristianismo y sirviese al imperio y a los dioses romanos. 
A cambio de ello, Claudio estaba dispuesto a perdonarle y convertirle en uno de sus aliados. 
Pero San Valentín se aferró a su fe y no renunció a Cristo. 
Debido a ello, el emperador le sentenció a una ejecución en tres partes. 
Primero le pegarían una paliza, luego le apedrearían y, finalmente, le decapitarían. 


Valentino fué arrestado y enviado a prisión. Durante las últimas semanas de su vida, algo impresionante sucedió. 
El carcelero, habiendo visto que Valentino era un hombre de letras, pidió permiso para traer a su hija, Julia, a recibir lecciones de Valentino.

Julia, quien había sido ciega desde su nacimiento, era una joven preciosa y de mente ágil. 
Valentino le leyó cuentos de la historia romana, le enseñó aritmética y le habló de Dios 

. Ella vió el mundo a través de los ojos de Valentino, confió en su sabiduría y encontró apoyo en su tranquila fortaleza. 
"¿Valentino, es verdad que Dios escucha nuestras oraciones?" 
Julia le preguntó un día. 
"Si, mi niña. El escucha todas y cada una de nuestra oraciones," 
le respondió Valentino. " 
¿Sabes lo que le pido a Dios cada noche y cada mañana? 
Yo rezo porque pueda ver. 
Tengo grandes deseos de ver todo lo que me has contado!" 
Valentino le contestó, "Dios siempre hace lo mejor para nosotros, 
si creemos en El." "Oh, Valentino, yo si creo en Dios", 
dijo Julia con mucha intensidad. "Yo creo." 
Ella se arrodilló y apretó la mano de Valentino. 
Se sentaron juntos, cada uno en oración. 
De pronto, una luz brillante iluminó la celda de la prisión. 
Radiante, Julia exclamó, "Valentino, puedo ver, puedo ver!" 
"Gloria a Dios!" exclamó Valentino. 

En la víspera de su muerte, Valentino le escribió una última carta a Julia pidiéndole que se mantuviera cerca de Dios y la firmó "De Tu Valentino". 

Valentino fué ejecutado el día siguiente, el 14 de febrero del año 270, cerca de una puerta que más tarde fuera nombrada Puerta de Valentino para honrar su memoria. Fué enterrado en la que es hoy la Iglesia de Praxedes en Roma. 


Cuenta la leyenda que Julia plantó un Almendro de flores rosadas junto a su tumba. Hoy, el árbol de almendras es un símbolo de amor y amistad duraderos.